Una hernia discal es una lesión que se produce cuando uno de los discos intervertebrales que amortiguan la columna vertebral se desplaza o se rompe, provocando dolor, inflamación y compresión de los nervios. Esta afección puede afectar a cualquier parte de la espalda, pero es más frecuente en la zona lumbar.
El tratamiento de la hernia discal depende de la gravedad de los síntomas, la localización y el tamaño de la lesión, y la respuesta del paciente a las medidas conservadoras. En la mayoría de los casos, se recomienda un tratamiento no quirúrgico que incluye reposo, medicación antiinflamatoria y analgésica, fisioterapia, infiltraciones epidurales y cambios en los hábitos de vida.
Sin embargo, hay situaciones en las que la cirugía puede ser necesaria para aliviar el dolor y evitar complicaciones mayores. Algunos de los criterios que se tienen en cuenta para indicar una intervención quirúrgica son:
- Que el dolor sea intenso y persistente, y no mejore con el tratamiento conservador tras 6 semanas o más.
- Que haya signos de compresión nerviosa severa, como pérdida de fuerza o sensibilidad, dificultad para caminar o controlar la orina o las heces.
- Que haya riesgo de daño permanente en los nervios o la médula espinal, como en el caso del síndrome de la cola de caballo, que afecta a las raíces nerviosas inferiores y puede causar parálisis e incontinencia.
- Que la hernia discal sea muy grande o esté localizada en una zona difícil de acceder con otros métodos.
La cirugía para tratar una hernia discal consiste en extraer el fragmento del disco que está comprimiendo el nervio, liberando así el espacio y aliviando el dolor. Existen diferentes técnicas quirúrgicas, desde las más invasivas hasta las más mínimamente invasivas, que se adaptan a cada caso según las características del paciente y de la lesión.
La cirugía no está exenta de riesgos y complicaciones, por lo que debe ser considerada como una opción cuando los beneficios superan los posibles inconvenientes. Además, es importante seguir unas pautas de cuidado postoperatorio y un programa de rehabilitación para favorecer la recuperación y prevenir las recidivas.
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